Miguel de Cervantes Saavedra, el escritor y soldado que fue preso y esclavo en una cárcel de Argel
¿Saben ustedes que el mejor escritor en español que han conocido los tiempos, autor de “El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha” y soldado en Lepanto, «la más alta ocasión que vieron los siglos», tuvo una vida plena de aventuras y peligros?
D. Miguel de Cervantes tuvo una vida muy azarosa y llena de peligros. Llega a Italia en 1569 posiblemente tratando de escapar de una providencia de prendimiento firmada por el rey nuestro señor Felipe II después de herir en un duelo a un tal Antonio Segura o Segira, arquitecto al servicio del monarca.
Parece ser que Cervantes fue condenado en rebeldía a diez años de encierro y a que le fuera amputada la mano derecha. ¿Cierto? Si le condenaron en rebeldía, es que había huido. Algunos autores afirman que esa condena pudo ser impuesta a otro Miguel de Cervantes.
En Italia se alistará como soldado en el Tercio de Miguel de Moncada, lugarteniente de D. Juan de Austria, hijo del Emperador y Rey Carlos y hermanastro del rey nuestro señor Felipe II. En 1571 se embarca en la galera «Marquesa» con el objetivo de derrotar al turco.
El 7 de octubre de 1571 tiene lugar la batalla de Lepanto, donde a Cervantes no le importaba «morir peleando por Dios y por su rey», «luchando como valiente soldado con los dichos turcos en la dicha batalla en el lugar del esquife como su capitán lo mandó y le dio orden».
De Lepanto «salió herido de dos arcabuzazos en el pecho y en una mano, de que quedó estropeado». En Lepanto pierde el movimiento de la mano izquierda al ser seccionado un tendón por un trozo de plomo (no sufrió la amputación de la mano).
Miguel de Cervantes estuvo cinco años en los tercios italianos ascendiendo en una prometedora carrera militar. Había luchado en Lepanto, Navarino, Corfú, Bizerta y Túnez y residido dos años en Nápoles.
En septiembre de 1575 se embarca en Nápoles camino de España para tratar de que le reconocieran el grado de capitán. Cuando el barco en el que viajaba navegaba frente a las costas de Cataluña, un flotilla turca hizo presos tanto al escritor como a su hermano Rodrigo.
El secuestro ocurrió el 26 de septiembre de 1575. Los corsarios turcos lo llevan a Argel donde venden a D. Miguel de Cervantes como esclavo al renegado griego Dali Mami. Allí sufre cautiverio durante cinco años a pesar de cuatro intentos de fuga.
Cuando es apresado Cervantes, sus captores encuentran entre sus ropas unas cartas de recomendación de D. Juan de Austria. Esos documentos hacen pensar a los corsarios que Cervantes era una persona importante y por quien podrían conseguir un buen rescate.
Miguel de Cervantes fue liberado el 19 de septiembre de 1580 gracias a la mediación de la Orden de la Santísima Trinidad y de los Cautivos. Para rescatar a Cervantes, los se tuvieron que entregar a Dali Mami un rescate de 500 escudos, un dineral para la época.
Miguel de Cervantes cuando fue liberado el 19 de septiembre de 1580 se encontraba embarcado en el puerto de Argel a bordo de una galera atado con «dos cadenas y un grillo». Regresó a España el 24 de octubre de 1580.
D. Miguel de Cervantes, además de sufrir cautiverio en Argel estuvo en otras dos ocasiones preso. En 1597 estuvo preso en la Cárcel Real de Sevilla acusado de haberse apropiado de unos impuestos y en 1604 en Valladolid por una acusación falsa de asesinato.