Margaret Jones, la primera «bruja de Salem» ahorcada

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Margaret Jones

Margaret Jones

15 de junio de 1648 fue ahorcada en Boston Margaret Jones condenada por brujería. Fue la primera persona ejecutada a causa de la caza de brujas que se desató en la colonia inglesa de Massachusetts entre 1648 y 1693. En América del Norte ejecutaron más «brujas» que la Inquisición española.

Margaret Jones era comadrona. Fue una de las primeras llamadas «brujas de Salem» condenadas. El gobernador de Massachusetts se basó para acusarla de brujería en el «Manual del Cazador de Brujas» escrito por el general inglés, Matthew Hopkins.

La pobre Margaret Jones fue observada durante 24 horas por el ayudante del juez, un tal Winrhrop, siguiendo las instrucciones del manual de Hopkins. El ayudante afirmó q había visto la figura de un diabillo rodear a Jones mientras estaba ésta sentada con las piernas cruzadas.

Un testigo también afirmó en el juicio que estando en prisión se la vio con un niño en brazos y que cuando este se acercó el niño salió corriendo hacia otra estancia y se desvaneció sin que pudiera explicar cómo había ocurrido.

También se la acusó de haber sido dotada de un toque maligno que provocaba sordera, vómitos y dolores a cuantos niños acariciaba y que había confesado que las medicinas que ofrecía a sus pacientes no servían para nada. Además era capaz de predecir el futuro.

Fue ahorcada el día 15 de junio de 1648 en Boston. Testigo de la ejecución fue John Hale que por entonces tenía 12 años. Siendo adulto fue uno de lo principales acusadores en los famosos juicios de Salem que se celebraron entre enero de 1692 y mayo de 1693.

A John Hole se le pasó la «tontería» cuando su propia esposa fue acusada de practicar la brujería. Entonces cambió de opinión y publicó una crítica sobre los juicios de Salem que contribuyó a acabar con la caza de brujas.

¿Y como actuaba la Inquisición española frente a las acusaciones de brujería? «Antes de pensar q la bruja ha llegado un pacto con el diablo preguntarse si se trata de una enferma que hay que curar y no matar.»

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