Lope de Vega, el Fénix de los Ingenios y de los Líos de Faldas
El 27 de agosto de 1.635 falleció Lope de Vega Carpio, el Fénix de los Ingenios. ¿Saben ustedes que además de brillante escritor de más de mil obras fue soldado, sacerdote e inquisidor? Luchó junto al Álvaro de Bazán, se alistó en la Gran Armada de 1588, fue preso y también desterrado.
Sus amantes fueron incontables. La primera conocida se llamaba María de Aragón, hija de una panadera con la que tuvo una hija llamada Manuela en 1581 que murió a los cinco años. La segunda conocida, Elena Osorio, casada, le trajo grandes problemas.
Antes de andar en amores con Elena Osorio, D. Lope se embarcó en la flota que D. Alvaro de Bazán, el invicto, dirigió contra el portugués en aguas de las islas Azores, en concreto en la Isla Terceira. Se alistó en el Tercio de Figueroa, en donde también se encontraba enrolado D. Miguel de Cervantes.
Elena Osorio estaba casada con el actor Cristóbal de Calderón y era hija del empresario de teatro Jerónimo Velázquez para el que Lope, que tenía 25 años, escribía comedias. Fallecido el marido, el Fénix de los Ingenios pensó que Elena se desposaría con él. Y no fue así.
La viuda optó por los brazos de un hombre acaudalado. Despechado Lope no tuvo mejor idea que utilizar su pluma para lanzar libelos y versos contra la que había sido su amante. Fue hecho preso en 1587 mientras se representaba una comedia en el Corral de la Cruz.
En la cárcel, el obseso de Lope siguió escribiendo contra la hija de Jerónimo Velázquez. Su obstinación le valió una condena de destierro de la Corte de cuatro años y dos de Castilla. Acabó en Valencia no sin antes raptar con su consentimiento a Isabel de Urbina con la que se casó el 10 de mayo de 1588.
En Valencia nació su hija Antonia de donde salió para Lisboa para alistarse en la mal llamada “Armada Invencible”. O eso mantuvo durante toda su vida, pues las pruebas de su participación en aquella empresa contra el inglés son más que difusas.
Según el Fénix de los Ingenios anduvo embarcado en un galeón de la escuadra de Portugal, el San Juan. Es posible que se embarcara huyendo de la Justicia que por entonces le tenía en el punto de mira por el secuestro de Isabel de Urbina.
En 1589, de vuelta a España, se fue a Toledo y en 1591 entró al servicio del Duque de Alba. Su mujer Isabel de Urbina falleció al dar a luz a su hija Teodora. Regresó a Madrid en 1595 al levantarse la pena de destierro y su hija Manuela murió al año de la vuelta.
En Madrid volvió a ser procesado: esta vez por su amancebamiento con la viuda Antonia Trillo de Armenta. Después conoce a la actriz Micaela de Guzmán, lo que no le impide casarse con Juana de Guardo, por la dote, pues era hija de un adinerado proveedor de carne y pescado.
Cuentan que el famoso Quevedo compuso unos versos en los que se mofaba de Lope diciendo que se “casó con carne y pescado”. Su boda con Juana de Guardo no le impidió al Fénix tener cuatro hijos con la actriz Micaela: Juan, Félix, Marcela y Lope Félix.
Con Juana de Guardo tuvo a su hija Jacinta. Aquella época en la que anduvo con Juana y Micaela fue muy productiva. Lope en 1602 escribió 230 comedias y en 1609 nada menos que 483. Al año siguiente compra la casa que actualmente se puede visitar en el Barrio de las Letras de Madrid.
En 1614 Lope de Vega se ordena sacerdote lo que no le impide enamorarse de Marta Nevares mientras también tenía relaciones con la actriz Lucía Salcedo (la Loca). Por aquella época volvió a Valencia y regresó a Madrid con un hijo seguramente fruto de una relación de tiempos del destierro.
Marta Nevares estaba casada con un comerciante lo que no la impidió tener una hija con Lope: Antonia Clara. La pobre Marta se quedó ciega en 1628 y acabó muriendo en 1632. Lope Félix murió y su hija Antonio Clara se fugó con un tal Cristóbal Tenorio.
El 24 de agosto de 1635 Lope se sintió indispuesto cuando asistía a unas conferencias sobre Medicina y Filosofía. Al día siguiente se encontraba tan mal que el el médico de cámara del rey le recomendó la extremaunción.
El 26 de agosto Lope hizo testamento nombrando a su hija Feliciana heredera. Al día siguiente, a las cinco y cuarto de la tarde, el Fénix de los Ingenios, falleció. Fue enterrado en la iglesia de San Sebastián en la calle Atocha de Madrid.
D. Lope era tan famoso y popular que sus exequias fúnebres duraron nueve días. Está documentado que Lope tuvo doce hijas y cinco hijos de seis mujeres. Diez de ellos murieron siendo niños. Además escribió unas 1.500 obras de teatro. Hay tiempo para todo si uno se lo propone.