Nuevo Mundo Travesía Descubrió
El 3 de agosto de 1492 sesenta y seis hombres al mando del capitán general Cristóbal Colón parten hacia oriente por una ruta desconocida desde Palos de la Frontera embarcados en la nao «Santa María» y en las carabelas la «Pinta» y la «Niña». Descubrirán el Nuevo Mundo, América.

En la «Santa María» embarcaron 29 tripulantes, en la «Pinta», 23 y en la Niña, 16. La primera estará capitaneada por Colón, la segunda por Martín Alonso Pinzón y la tercera por Vicente Pinzón. Parten en el amanecer del 3 de agosto de 1492 del puerto de Palos de la Frontera.
La expedición tenía un presupuesto de dos millones de maravedíes, más de la mitad a costa del tesoro de Castilla y al contrario de lo que se piensa, la reina Isabel no tuvo que vender sus joyas para hacer tal aportación. M. A. Pinzón puso medio millón y el resto varios navieros.
La expedición tardó en alcanzar las costas de lo que Cristóbal Colón creyó Asia 132 días y el grito de «Tierra» fue lanzado por el vigía de la pinta Rodrigo de Triana a las dos de la madrugada del 12 de octubre de 1492, festividad de la Virgen del Pilar.
Para los «intensitos» que afirman q los españoles no descubrieron nada basta con mostrarles el significado de descubrir del Diccionario de la RAE: «Hallar lo que estaba ignorado o escondido, principalmente tierras o mares desconocidos». América era desconocida por la gran mayoría
Por otra parte, a aquellos que afirman que los españoles no pudieron descubrir América porque ya la habían descubierto los americanos decirles que estos ni siquiera sabían qué había más allá de la zona donde sobrevivían. D. Luis de Antequera lo explica muy bien.
“El término «Descubrimiento de América por los navegantes españoles» es totalmente preciso, y más preciso que ninguno otro que hasta la fecha haya podido proponerse o utilizado. (…) Se dice que los marinos españoles no pudieron descubrir América porque antes que ellos ya lo habían hecho los propios americanos. Nada más torticero, engañoso y a la vez errado. La realidad es que los americanos no habían descubierto nada: los americanos vivían en América y basta, sin haber realizado ningún descubrimiento, no solo sin preguntarse cómo era el planeta en el que vivían o lo que había allende las aguas cuyas olas veían agitarse, sino sin ni siquiera conocer lo que había en su propio entorno más allá de lo que constituía su hábitat de supervivencia, ni menos aún las dimensiones y la forma del inmenso continente en el que su vida se desenvolvía. Algo en lo que los americanos, por cierto, no eran ni mejores ni peores que europeos o africanos, los cuales tampoco habían «descubierto» ni Europa ni África por el sólo hecho de «residir» en ellas.”
